publicidad

publicidad

Que caiga todo el peso de la ley sobre los responsables del despilfarro en el SIVA

La negligencia en la ejecución de los proyectos en los que incurren algunos funcionarios debe ser castigado a tiempo, para poder tomar con antelación las medidas y no caer en estos detrimentos que le causan al Estado.
Álvaro Molina, líder del barrio Amaneceres del Valle, denunció a tiempo que lo que estaban haciendo en el Canal de Panamá no era lo adecuado, pero por ser un líder lo ignoraron y siguieron adelante con un proyecto que fracasó, que ya se ve deteriorado. Lo que se hizo fue una cañería de pueblo, cuando estamos hablando de una ciudad que va en crecimiento y se está modernizando a pasos agigantados, tal como lo está demostrando Valledupar.
La gerente Katrizza Morelli tendría toda la responsabilidad de esta obra porque ella adjudicó el contrato, lo firmó y al parecer, también recibió la obra que a los ojos de cualquiera se puede decir que es un fracaso.
Es un tema que requiere de un actuar inmediato por parte de los aportantes de los recursos, que en este caso son el gobierno Nacional y departamental, ambos socios del Siva; y la alcaldía de Valledupar. De la Procuraduría para que investigue directamente a esta funcionaria, de la Contraloría para que se responda por los recursos de esta obra y de la Fiscalía, por si esto tiene algún tipo de incidencia penal.
Ahora bien, hay algo que está en entre dicho, porque además de que la gerente del Siva no da la cara, preguntarle por quien es el contratista de dicha obra es un misterio de nunca acabar.
¿Dónde está el contratista de esa obra? ¿Quién es? ¿Dónde está radicado? ¿Qué materiales utilizaron? Queremos tener toda la explicación que debe ser de conocimiento público y que a todos nos interesa.
Es muy fácil hacer pataletas, no dar la cara, no dar las explicaciones que le corresponden a dicho proyecto y darse la vista gorda como si la plata les perteneciera; como si el Siva fuera una institución que no dependiera de los recursos públicos, como si se mandaran solos.
El Siva parece un bunker donde los líderes no son tomados en cuenta y al que la mayoría de los ingenieros y arquitectos de esta ciudad le han criticado sus obras. Estamos arrancando por el Canal de Panamá pero el deterioro de la avenida Simón Bolívar va a ser grande y el menoscabo de la avenida Fundación va por el mismo camino.
Se han pintado unos corredores viales de dos carriles en rutas que desembocan de carreteras nacionales y que están ocasionando un colapso en la ciudad para más adelante salir con la excusa de que no fueron suficientes por lo que hay que hacer un tercero que le costará más dinero al municipio, a la gobernación y a la Nación.
¿Por qué no hacer las obras con proyección a futuro, pensando que el parque automotor y que la población de Valledupar va a crecer, y que sea una obra que se puedan disfrutar 20 años? Ahora quieren hacerlas para solventar el problema inmediato y no las ven con visión al mañana.
¿Los responsables de esto habrá que esperarlos cuatro o cinco años cuando hoy están visibles? La gerente esta visible, la obra está deteriorada, las denuncias están puestas.
Este medio va a mandarle copias al contralor Edgardo Maya, que sabemos que recientemente estuvo visitando la obra; al procurador Fernando Carillo para que venga a darse cuenta en que se están invirtiendo los recursos y al fiscal, Néstor Humberto Martínez para que de una vez por todas se dejen de amangualar las ‘ías’ y que a tiempo cada cual tome las acciones que le corresponda para que se preserve el bien común y no el interés particular.

Deja una respuesta

publicidad

publicidad