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TIKI Y TAKA: LAS CAMISETAS NO SE VENDEN POR LA PUBLICIDAD

Ningún equipo de fútbol colombiano figura entre los 50 primeros que venden más camisetas en el mundo. Esta es una lista elaborada por una gran agencia de marketing en la que sólo figuran los clubes europeos y que mantiene en el podio al Manchester United (1.750.000), por encima del Real Madrid (1.650.000) y el Barcelona (1.278.000). Según un informe local de hace tres años, el Atlético Nacional es el equipo que vende más camisetas (40.000) seguido de Millonarios (35.000), América (27.000) y Júnior (25.000) empatado con Santa Fe.
Sin ver las cifras cualquier neófito podría explicar que la venta de camisetas obedece principalmente a la ganancia de títulos importantes, interpretación que razonaría el porqué de la ausencia en esa lista de clubes colombianos. Pero analizando el ránking observamos que el United es un club que lleva muchos años sin ganar la Champions League y unos cuantos menos sin conquistar la Premier.
Los contratos con las marcas de ropa deportiva es una de las fuentes más importantes de ingresos que tienen los clubes. El Barcelona, por ejemplo, tiene un contrato con Nike que le proporciona a sus arcas la friolera de 105 millones de euros anuales, que se incrementa de acuerdo a los títulos obtenidos; el Manchester United con Adidas le sigue con 96 millones, y el Real Madrid con la misma firma que tienen los ingleses recibe unos 70 millones, más el 22,5% de las ventas.
Con la marca de la ropa y el patrocinador a los clubes europeos les basta para obtener unos importantes ingresos. Llama la atención que en Colombia no existan informes sobre este tipo de ingreso. Pero especialmente resalta el hecho que la mayoría de clubes manchan su camiseta con varias marcas publicitarias, y lo más importante: esconden el nombre del jugador que la lleva.
Está comprobado que el aficionado que compra una camiseta de su equipo favorito es porque quiere llevar los colores de su club, vestirse como viste su equipo, pero nunca compra la camiseta porque esta es Adidas, Nike o Umbro. Y también está comprobado, que otra gran mayoría de aficionados va a la tienda a comprar una camiseta porque lleva marcado el nombre de su futbolista preferido, llámese James, Cristiano Ronaldo, Messi, Neymar o Luis Suárez. Para mí es un error que los clubes escondan en la parte baja de la espalda el nombre del jugador. A un club lo identifican primero sus colores y después sus jugadores.
Una entidad que se ha gastado millones en la ficha de un jugador no puede desperdiciar su imagen. Tiene que explotarla al máximo. Después de renovar a Messi hasta el 2021, Barcelona acaba de lanzar una campaña en la que sortea entre sus fans camisetas firmadas por el argentino y que llevan su nombre encima del número en la parte trasera. Creo que Junior haría bien en cambiar esa estrategia. Una camiseta con el nombre de Teo, Chará o Viera vendería más. Sin duda.

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