La pelea que hace poco cazó la presidenta del concejo de Bosconia, Liliana Mendoza, con algunos concejales por un puesto político ha sido el principal escándalo que se ha armado en este municipio, toda vez que unos pactos hechos al inicio de este año para ocupar la silla de la presidencia de esta corporación para los cuatro años de gobierno quisieron ser pasados por la faja por la única mujer de este concejo, que con sus actos y palabras se quiera posicionar como la mandacallá.
Sin embargo, su aparente abuso de autoridad y la arbitrariedad, que al parecer, tuvo al cambiar el voto de uno de los concejales para ella montar pollo en la presidencia del año 2017, fue cuchillo para su propia garganta, puesto que mientras la concejal creyó haber salido victoriosa de esta pelea política que emprendió en contra del concejal Danilo Ospino, el también corporado Álvaro de Los Reyes le entuteló dicha decisión, la cual fue respaldada por el Juzgado Promiscuo Municipal de Bosconia, dejando sin efectos la elección de la mesa directiva del Concejo realizada el pasado 04 de noviembre.