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Dos instituciones de Bosconia que el alcalde está dejando caer a pedazos

La educación y la salud son considerados dos de los servicios más importantes para una población, pero en Bosconia las denuncias de la comunidad están dejando al descubierto la negligencia con la que actúa el alcalde Edulfo Villar Estrada en esos sectores. En materia de educación, el colegio más importante del municipio, que es Luis Quintero Araujo, se está cayendo a pedazos, los padres de familia están librando una lucha para recuperarlo mientras el mandatario se hace el de la ‘vista gorda’ con el tema, y por el lado de la salud, hay graves denuncias sobre el pésimo manejo que está haciendo la gerente, quien habría llegado al cargo para pagar favores políticos.

A pesar del recurso girado por el anterior alcalde, el proyecto para la reparación del colegio Luis Quintero Araujo de Bosconia no se ha podido llevar a cabo porque la administración departamental no ha girado el restante de recursos, incluyendo los recursos de la Nación que son el 70%. La institución es una de los más importantes del municipio. Sin embargo, el deterioro del centro educativo cada día es más evidente, los líderes comunitarios y egresados, temen a que este se convierta en un elefante blanco que impida educar a la mayoría de los niños del municipio.

Marelvis Blanco, líder comunitaria y egresada de la institución, comentó que ha hecho todo lo posible junto a otros profesionales egresados para elaborar un proyecto de remodelación y arreglo para el colegio; plan que no han podido ejecutar debido a que sólo cuentan con una parte de los recursos que se necesitan.

“Este colegio fue fundado en 1973, es un colegio con casi 50 años y es del departamento. Tiene al menos unos 2.000 estudiantes y tiene sede de primaria y bachillerato. Ahora mismo se encuentra en un estado muy deteriorado. He venido gestionando con un representante a la cámara unos recursos y logré que se montara un proyecto, pero necesitamos recursos para que el colegio se arregle. Estamos en lucha para que entre en Ley 21 junto con el señor rector, quien nos ha estado ayudando. El colegio es una eminencia y se han graduado”, aseguró Blanco.

La líder comentó que egresados del centro educativo Luis Quintero Araujo, que ahora son profesionales, dentro de ellos: arquitectos, ingenieros y otros más; estuvieron brindando su ayuda para poder crear el proyecto que permita salvar el lugar que educa a más de dos mil niños en Bosconia.

“La inversión que el colegio necesita es de unos 5.000 millones de pesos para poder restablecerlo. Hemos hecho alguna gestión con el alcalde anterior quien dejó comprometido el 10% que le tocaba al Municipio equivalente a 500 millones, un 20% le toca ponerlo a la Gobernación que son 1.000 millones y un 70% que pone la Nación. Ha sido un proyecto montado con las uñas, partiendo desde ahí lo que queremos es que esto no se politice y que camine, porque no tiene ninguna influencia política, sólo existe la necesidad de arreglar esta institución. La administración anterior había dejado comprometido en vigencia futura con préstamo de regalías. Quiero hacer eco para tener ese recurso para priorizar lo que se necesita para el colegio”, dijo.

Según Marelvis Blanco el actual alcalde Edulfo Villar Estrada se comprometió a respaldar dicho proyecto. Sin embargo, las conversaciones para seguir adelante con este apoyo quedaron en espera por la llegada del Covid-19 al municipio, teniendo en cuenta que el actual alcalde fue uno de los alcaldes en dar positivo para el virus en el Cesar. “Con el alcalde actual me reuní antes de pandemia y se mostró satisfecho con el proyecto dijo que, aunque no tuviera los recursos los iba a conseguir donde fuera para arreglar el colegio. No hemos podido entablar más reuniones por el momento en el que dio positivo para Covid-19 y hay que tener cuidados en estos momentos críticos”.

El San Juan Bosco también va de capa caída

Otra de las instituciones de gran importancia para el municipio de Bosconia es el hospital San Juan Bosco, el cual hoy está atravesando por una enorme crisis por cuenta del paupérrimo manejo que se le está dando.

La denuncia de lo que está pasando en ese centro médico la puso el médico Carlos Castañeda, quien a través de un mensaje en Facebook puso al descubierto una serie de anomalías. “Cómo es posible que no se nos informe de quienes son los compañeros que se han infectado, segundo que nunca se haya hecho por lo menos una prueba rápida al personal de la institución sabiendo que hay varios trabajadores contagiados, tercero que se nos da un tapabocas N95 cada 8 días y nos toca reutilizar batas quirúrgicas”, dice apartes de la publicación de Castañeda.

Estas y otras inconsistencias en el manejo del hospital de Bosconia habría sido el detonante para que el trabajador del centro médico Víctor Vargas hoy esté debatiéndose entre la vida y la muerte por cuenta del Covid-19. “Cómo no fueron capaz de mandar a la casa a trabajadores de alto riesgo por su edad y comorbilidades, como es el caso del señor Víctor Vargas, que ya debió estar pensionado en su casa, disfrutando de lo que ya se ganó con el sudor de su frente, entregándolo todo por la institución, y hoy en día se debate entre la vida y la muerte”, denunció.

El pasado mes de abril Fénix Barraza asumió como gerente del hospital San Juan Bosco

La Calle conoció que existe un listado con otros trabajadores del hospital que también están contagiados, se habla de que hay desabastecimiento no solo en los elementos de protección si no en medicamentos e insumos, el Rayo X no sirve y ya hasta mandaron de vacaciones al técnico en imagen por qué no tiene nada que hacer, además de que el laboratorio estaría completamente desabastecido.

Lo más grave de la situación y que nos contó una fuente que trabaja al interior del hospital, es que la gerente, Fénix Barraza, habría facturado más de mil 300 millones de pesos durante la pandemia en recuperación de cartera y hoy no hay certeza en qué se ha invertido. Mientras todo esto pasa, el alcalde Villar Estrada guarda silencio.

 

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