Un fallo en contra fue la primera batalla perdida de los 15 concejales y el Contralor municipal que tienen embalados en la Procuraduría general de la Nación al parecer por una venganza personal en contra de Álvaro Castilla Fragozo que lo busca tumbar del cargo y como daño colateral se estaría llevando a los honorables que hoy para colmo de males al parecer estarían reventándose por grupos con la Administración Municipal.
Este primer fallo no solo dejó sin aliento a más de un corporado sino que se originaron los choques de trenes al interior del Concejo, no obstante esta al parecer es la primera batalla de la guerra que darán los concejales, pues el 22 de julio será presentado el proceso de apelación por parte de los corporados con el cual buscan que a mediado de septiembre en el fallo de segunda instancia, revoquen la primera sanción que los dejaría muertos políticamente durante 13 años.
La falta cometida por los concejales fue considerada por el órgano de control como gravísima y dolosa, pues supuestamente los concejales conocían de las inhabilidades de Castilla Fragozo y de su cercanía con el alcalde de Valledupar Augusto Daniel Ramírez Uhía y aun si lo eligieron.
Mientras esta es la realidad que se evidencia en el tan sonado y polémico proceso de los concejales en las redes sociales, las opiniones han estado divididas, pues mientras unos le brindan su apoyo y los respaldan, otros simplemente les han dado hasta con el balde.